Costa Rica en tiempos de pandemia

Que bella es mi Costa Rica, es un hermoso país, pero como se ponen de tristes los ticos, al ver como la pandemia destruye el país y es que solo se escucha un terrible rugir, pero no es más que el susurro del pueblo, que ya siente que no puede sobrevivir.

Pero esto que se está viviendo es una realidad, que está destruyendo todas las clases de esta sociedad. Se escucha un silencio ahogante, lleno de tempestad. Es que como duele ver a las madres llorar, por el terrible miedo de salir a la calle a comprar y esos pensamientos que no las dejan vivir en paz.

Hay, pero para que nos quejamos, basta de esto ya, sí como buenos ticos sabemos que esto ya va a pasar, lo que hoy nos agobia mañana ya no nos dará pesar. En un abrir y cerrar de ojos todo vuelve ala normalidad, Una mañana de estas con los amigos, ya podemos ir a desayunar, Y con un fuerte abrazo les vamos a saludar.

Por ahora no nos queda mas que confiar en papá, Que no nos abandona y el su mano nos da, Con su gran ayuda lo vamos a lograr y todos juntos a la meta vamos allegar, Yo bendigo Costa Rica que es un gran país, Un prodigio para Centro América en el cual yo amo vivir. Uyuyuy bajura.

Autor: Enid Pérez Jiménez

Educador

Amado educador, maestro, maestra, profesor, profesora como se guste usted llamar, Que lindo se siente que usted nos pueda enseñar, pero lo más lindo es la realidad, Que con tanto cambio usted se pudo adaptar, y en tan poco tiempo pudo forjar otra forma de enseñar, Con tanta destreza de una forma especial.

En este tiempo podemos notar, que ustedes se dedican con amor a enseñar, Viendo cada día que tienen que prever, los diferentes recursos para poder se sostener, notando la ausencia de los que hoy ya no están, de esos chicos que no lo pudieron lograr. Que por diferentes motivos tuvieron que desertar.

Hoy yo les motivo a siempre luchar que ustedes son la fuerza, Por la que nosotros podemos arrancar, hemos tenido un año loco Lleno de emoción, pero con su apoyo estamos por decirle adiós, Que bonito se siente aquí, en el corazón, saber que tenemos guerreros que luchan por la educación.

Hasta la fecha hemos logrado una buena coordinación, no ha sido fácil Pero aquí estamos hoy siendo valientes y dando lo mejor, Cuanto me alegra ser parte de este cuerpo estudiantil, que tiene a su lado a un buen educador. Y como un recordatorio les voy a informar que en nuestro corazón siempre ocuparan un lugar.

Autor: Enid Pérez Jiménez.

Toño cuenta cuentos.

Era se una vez un lindo muy lindo padre de familia, que le gustaba contarle cuentos a sus hijos, vivía en una zona boscosa, su casa estaba ubicada en un cerro muy alto, era una preciosa casa en madera estilo cabaña alrededor de su hogar, había muchos árboles frutales, como mandarina, naranja, mango, guayaba, también se encontraba un reconocido árbol de higuerón para aquellos que no saben que es un árbol de higuerón, es un bejuco este suele enredase y comerse el antiguo amigo que le dio posada así se forma muy frondoso y verde cuando el antiguo huésped se pudre este queda hueco por dentro , pero este árbol es muy peculiar ya que su fruto atrae diferentes especies de pájaros que emigran a costa rica por temporadas. Bajo su sombra Toño cuentacuentos pasaba la mayor parte del día aprovechando se frescura y reconociendo las diferentes especies de pájaros, entre ellos cantar veranera, viudita y otras, que lugar tan perfecto en especial para un contador de cuentos.

Cuantas generación se sentaron debajo del del árbol higuerón a escuchar los cuentos de Toño cuenta cuentos, Toño cuenta cuentos es todo un personaje muy reconocido en a aquel lugar por su característica forma de ser, con tanto amor para dedicar y tantas historias para contar, los hijos de Toño dejaron el hogar pero cada vez que vuelven aprecian escuchar a su padre un cuento contar, sus hijos de memoria sus cuentos se saben ya, pero eso no les importa, por que a su padre aman y es una forma especial de tiempo para dedicar. Los cuentos de Toño son algo peculiar por que todos son de diferente variedad desde princesas secuestradas por brujas en un castillo sin fin, o de sapos enamorados que luchan por un amor sinigual, él tiene muchos cuentos para contar todos los heredados que de memoria pudo aprender, sumándole a estos los que el invento al paso de crecer. Un día Toño tuvo que salir de su bello hogar con tristeza en el pecho se fue ala gran ciudad no era de su agrado pero no le quedo de más, se presentó una emergencia se tuvo que adaptar, en su corta estadía no encontraba mucho por hacer, sus hijos con preocupación buscaron solución ofreciéndole un paseo por el parque central de aquella peculiar ciudad, Toño con agrado aceptó de inmediato y poniéndose su mejor atuendo con ellos salió a pasear, hizo un recorrido por aquel lugar observado las especies de aves que tanto le gustaba admirar lo más sorprendido al ver tantas palomas que por su comida se querían matar, después de tanto andar se sentó bajo un árbol de mango a disfrutar de la sombra fresca. Estando ahí en su descanso se acercó un niño de mirada agobiantes, en sus ojos se podía notar la poca felicidad, estaba cansado y sucio de tanto trabajar para mantener su hogar, Toño con tristeza en los ojos se conmovió hasta lo mas profundo de su corazón por su cabeza paso un pensamiento y por un momento imagino que si fuese un familiar de él no lo podría soportar, entonces decidido con aquel niño conversar para romper el hielo le ofreció una botella de agua ya que era lo único que tenia con el en ese preciso momento el niño con entusiasmo lo acepto sin titubear y es que no era para menos ya que le podía sentir a Toño un gran amor y se dio cuenta que era muy particular, Toño con una sonrisa enorme su nombre le pregunto y el chico muy contento su nombre le dio, él le dijo mi nombre es Cesar gracias por preguntar, es un gusto conocerlo como lo puedo a usted llamar y el abuelo muy sonriente le dijo usted a mí me puede decir Toño cuanta cuentos. Toño cuentas cuentos wahoo por que te llaman a si, bueno lo que pasa es que con mucha frecuencia yo cuento cuentos, y así me reconocen en mi hogar, Cesar corrió de prisa y en el piso se sentó frunciendo el seño con una gran expresión y con un poco de duda pregunto me cuentas un cuento es que nunca nadie a mi un cuento me conto, que alegría para Toño que en medio de aquella gran ciudad a el lo quisieran escuchar, en ese momento todos los cuentos que Toño sabia daban vueltas en su cabeza pero a la vez se decía este cuento debe ser muy especial ya que es probable que a este chico nunca mas le vuelva a ver, y así divago en sus pensamientos como por 5 minutos disolviendo lo que él quería trasmitir ya que era importante para Toño cuenta cuentos marcar la diferencia en la corta vida de ese jovencito que se le notaba que adelante quería salir, y él pensó que si de esta forma podía ayudar a que Cesar a cambiar su forma de ver la vida lo iba intentar. Entonces Toño recordó sus años atrás, más o menos en 1997 cuando tenía más corta edad para esa época Toño estuvo muy enfermo cayendo en un hospital, fue una época muy dura para él, pero se pudo recuperar gracias al amor de Jehova, y en ese momento Toño decidido un testimonio contar y le dijo a Cesar muy sonriente yo una historia te voy a platicar esta es una historia real pero en tu corazón esta si me vas a escuchar y si la quieres yo te la voy a contar, cesar acepto con su cabeza entonces Toño empezó su relato.

Para el año 1997 cuando mis hijos menores aun eran pequeños yo enferme de los pulmones esto provoco que se hicieran llagas en mi garganta las cuales evitaban que yo pudiera comer, la causa principal de que se desarrollara esta enfermedad fue el fumado, por mi experiencia le recomiendo no fumar ya que dañarías tu vida sin vuelta atrás, dado el paso de la enfermedad todo se fue agravando yo evitaba ir al hospital porque no quería dejar a mi esposa he hijos solos, pero como la situación no era la mejor del momento termine por aceptar. Llegando al hospital mas cercano me hicieron un traslado a otra ciudad lo cual complicaba todo, para esa época no contábamos con los medios de comunicación del presente era casi imposible hablar con mi familia, los días pasaban y me encontraba exhausto ya que yacía en la cama de un hospital, mi contextura siempre ha sido de un hombre delgado pero ahí era irreconocible, un día paso el medico hacer su ronda matutina, se me quedo mirando y me dijo don Toño en este momento lo único que tenemos para usted es ponerle un sonda para que pueda tener una mejor alimentación yo lo mire y sin dudar le dije que no, el medico dijo es tu decisión piénselo con mucha seguridad respondí si DIOS me tiene a qui que se haga su santa voluntad el doctor salió de la sala muy conmocionado por mi respuesta. Después de este momento empezaron a suceder cosas sobrenaturales como por ejemplo los vasos se movían en la mesa y yo solo decía señor eres tú quien estas aquí, cuando yo les contaba a mis compañeros de salón lo que sucedía me creían por loco pero bueno yo solo guardaba silencio sabiendo mi situación actual y confiando en papa Dios, al cabo de unos meses me mandaron para la casa desahuciado ya no había nada mas que hacer yo solo pensaba en mis hijos sabiendo que el menor solo tenia 5 años, pero había que tomar lo que se venía con valentía, al llegar a mi casita me recibió mi esposita que sabia lo que pasaba pero no decía nada para no asustar a los pequeños los cuales me recibieron con una alegría innombrable papi había vuelto al hogar, sabiendo en mi corazón que quizá eran los últimos días que pasaríamos juntos, solo tenia voluntad para mirar los ya que no podía halar por el dolor provocado por las llagas y cuentos no podía contar, al cabo de una semana de vivir esta complicada situación, para acabar la de hacer me dio mal de estómago provocando una salida de emergencia al hospital mas cercano, donde la controlaron con suero, cuando Sali de mi casa hacia el hospital no podía hablar ni comer y mi cuerpo tenia llagas del lado ya que solo a si podía dormir de esa forma, para que la saliva cayera y no pasara por mi garganta, parecía ser el fin de mi historia. Estando en el hospital sucedió algo inesperado desperté ala mañana siguiente, me di cuenta que podía tragar con facilidad la saliva, a como pude me levante con mucha debilidad y me dirigí ala baño al ver que había sucedido abrí mi boca y las llagas que ahí yacían estaban secas muy conmocionado empecé a llorar y a dar gracias a DIOS por el milagro que hizo en mí, Sali del baño gritando estoy sano estoy sano la gente me miraba muy extrañamente pero eso a mi no me importaba por que sabia que era un milagro, cuando paso el doctor no podía creer lo que veía las llagas estaban total mente sanas, esa mañana pude tomar agua dulce con pan no en gran cantidad porque mi estomago ya no estaba adaptado a digerir comida, me dieron de alta llegue a mi casa le conté a mi esposa a mis hijos y a cada una de las personas que llegaban a visitar me el testimonio de mi sanidad esto lo hago hasta la actualidad, doy gracias a Jesús que habita en mi vida y por ese regalo tan preciado de permitirme ver a mis hijos crecer, porque clara es la palabra en Isaías 53: 5 donde dice que por sus llagas fuimos sanados.

Para el momento donde Toño terminaba de contar su historia a Cesar, cayó en cuenta de que no solo cesar le estaba poniendo atención, a su alrededor habían muchas personas escuchándole, y una de ellas dijo que tengo que hacer para conocer a ese Jesús del que usted habla, Toño muy sonriente le dijo aceptar le en su corazón, Toño cuenta cuentos tomo a cesar de la mano y le replico quieres tener a Jesús en tu corazón y Cesar dijo y a si podre ser tan feliz como lo es usted Toño, él le dijo que si con un movimiento de cabeza, después de esto hablo diciendo todo aquel que quiera a Jesús en su corazón repita conmigo esta oración Señor Jesús hoy reconozco que soy pecador que te he fallado y me arrepiento de todo corazón y decido aceptarte en mi vida como mi señor y salvador quiero contigo un nuevo caminar lleno de amor y bendición.

Después de todo lo sucedido Toño se despidió de Cesar haciéndole saber lo importante que había sido ese momento para el y confortándole a seguir siempre adelante, Toño cuanta cuentos volvía a su hogar con una historia más para contar y el aun se siente debajo del árbol de higuerón a contar cuentos a cada generación.

Colorín colorado este cuento ya se ha terminado

Autor: Enid Pérez Jiménez.